La catedral de Santa Eduvigis

La catedral de santa Eduvigis se convirtió en la primera iglesia católica construida en Prusia en el siglo XVIII después de la reforma protestante. En aquel tiempo, en Berlín, el número de inmigrantes católicos había aumentado considerablemente, especialmente provenientes de la Alta Silesia. Para ofrecer a las personas un lugar apropiado para el culto, Federico II decidió construir una iglesia católica. Fue nombrada en honor de la patrona de Silesia y Brandenburgo, Santa Eduvigis de Silesia. (Santa Eduvigis, duquesa de Silesia, que vivió en el siglo XIII y fue canonizada por su contribución a la difusión del cristianismo). El edificio está diseñado a semejanza del Panteón.
Durante el nazismo, la catedral era el único lugar en el que se denunciaba abiertamente la lucha contra la disidencia. El sacerdote de la catedral, Bernhard Lichtenberg, condenaba en sus sermones la quema de libros y de pinturas (esto último menos conocido, pero real), la persecución de los judíos y el asesinato de los pacientes en los hospitales psiquiátricos. Instaba a los feligreses a orar por los presos y las víctimas de la guerra en campos de concentración. En 1941, fue detenido y murió cuando era llevado al campo de concentración. Más tarde, fue canonizado por la iglesia romana.
A la izquierda de la plaza se encuentra la Ópera Estatal